Griselda Olga Castro

He ido bastante con mi nieto.
Dos veces ganó los 500 tickets pero no hay nada muy interesante para cambiarlos...
El lugar es pequeño.
Las máquinas de levantar cosas tienen unas pelota muy llamativas que él ha logrado enganchar pero las pinzas las sueltan porque son pesadas...y nos resulta un poco una estafa.
Pero no niego que hemos pasado lindo.

Me detuve para almorzar algo rápido a eso de las 12 del mediodía.
Hay opciones que ya tiene listas, pero no me interesaron: sándwiches y ensalada César.
También necesitaba ir al baño...enorme escaleta y recorrido para encontrarlo.
Había que esperar porque estaban preparando una mesada con platos de los cuales elegir para que la moza los sirviera.
Avise que estaba apurada pero cuando se dispusieron a tomar pedidos comenzaron por gente que llegó después que yo.
La bebida, un té frío, también se hizo esperar... puse el dinero sobre la mesa y me fui.
Todo parece lindo y rico. No pude probar nada.
Precios altos.

Preciosa plaza con obras de arte y hermoso verde.

Lugar hermoso con muy buena atención.
Venta de plantas y objetos decorativos acordes.
Precios elevados para mi bolsillo.

Me han atendido muy bien y rápido como necesitaba. Muy rico café.
El lugar es agradable y el precio mucho más barato que el de cualquier otra cafetería a la que haya ido.